EL HOGAR BIBLICO,
CRISTIANO Y FELIZ
Rev. M. Ricardo H.
Introducción: En este estudio, buscamos
comprender, que el hogar para que sea cristiano y feliz, debe ser bíblico. A la
vez, cuando hablamos del hogar bíblico, es porque hay, que no lo son. Miremos las diferentes
partes que contiene este tema entonces.
A. Su origen. El origen del hogar bíblico, se
encuentra desde el mismo momento en que el registro de la creación dice que
Dios hizo a un hombre y a una mujer, Gn.1:26-27. Un hogar, comienza con la
unión de un hombre y una mujer. A eso se refiere Adán cuando dice que Eva es
carne de su carne y hueso de sus huesos, Gn.2:24. A esta cita se refiere Jesús
en Mat.19:4-6. Por su puesto no podía el hombre inventar su hogar, pues
no existía; fue Dios quien lo hizo. Ese es el origen del hogar bíblico.
B. El Matrimonio. Como dice en nuestro libro de
fórmula:” El matrimonio es una ordenanza divina, instituida por Dios en el Edén y consagrada por la presencia de
Jesucristo en las bodas de Caná de Galilea. Es honroso en todos. Tiene por
objeto unir dos vidas y dos corazones, haciendo que se identifiquen en todos
sus intereses, simpatías y esperanzas. Exige por parte de los esposos
abnegación, confianza y amor mutuos”. Aunque existen muchas parejas, compuestas
de la unión de un hombre y una mujer, no son reconocidos como matrimonios,
porque se unieron en unión libre y por eso no son casados, porque no realizaron
un acto ceremonial, donde las partes, hombre y mujer, hacen votos mutuos de
pacto delante de Dios, sea ante el Estado o la iglesia. Esto es, para realizar
un matrimonio, se debe realizar un acto ceremonial, civil y religioso, ante la
sociedad y la iglesia, o que ambas cosas se reconozcan en el mismo acto
ceremonial, cuando el Ministro o Sacerdote, tiene el reconocimiento del Estado
por medio de un convenio de derecho privado, entre el Estado y las iglesias. Bíblicamente,
el matrimonio tiene su base, para dichas celebraciones, en Gen 2:24, donde dice
que el hombre se unirá su mujer y los dos son una sola carne, mediante los
votos de fidelidad y compromisos, del uno al otro. La ceremonia en si,
realizada por el ministro, y registrada en el Estado y las iglesias, no hacen
lo de “una sola carne”, sino los votos entre la pareja. Los registros por el
Estado y la iglesia, son requerimientos normativos de control en la sociedad,
para certificar el estado civil de las personas: solteros, casados, separados,
viudos etc. Además, esto conlleva a una unión de criterios y sentimientos
propios, como si los dos fueran la misma persona, de modo que no tienen
vergüenza de conocerse el uno al otro íntimamente, por que el acto de
relaciones sexuales en el matrimonio no es en pecado, sino santamente, pues,
¿qué extraño hay el mirarse uno mismo su propio cuerpo? Heb.13:4.Y todo en
base de ser cristianos, según 1Co.7:39.Ef.
5: 30. También lo que fue hecho en las bodas de Caná de Galilea, en Jn.2:2-10,
fue una celebración de matrimonio,
claramente.
C. Los Esposos. Es claro que para hablar de esposos,
se entiende que tiene que es con el hombre y la mujer casados, mediante el
matrimonio. Cuando el apóstol Pablo habla en Ef. 5: 22 -31, refiriéndose a
Is.62:5, se refiere a ellos. En este
pasaje vemos varias cosas:
1ª- Es la analogía o comparación, entre Cristo y la Iglesia, con el esposo y la esposa
2ª- Cristo es cabeza de la Iglesia
3ª- El esposo es cabeza de la esposa
4ª- La responsabilidad de la esposa es estar sujeta y en
obediencia a su esposo
5ª- La responsabilidad del esposo, es amar a su esposa y
sustentarla en todo hasta morir por ella
6ª- Cabeza, significa mando, dirección, y completa
responsabilidad sobre el cuerpo, que refiriéndose a Cristo es su iglesia y al
esposo, su esposa.
7ª- Para ambos, Cristo y el esposo, amar a la iglesia y a la
esposa, es como a su propio cuerpo, en razón de no ser ya dos, sino una sola
carne; tanto Cristo con la Iglesia, como el esposo con la esposa.
8ª- La obediencia y sujeción de la Iglesia hacia Cristo y la
esposa hacia el esposo, consiste en no estar en desacuerdos con ellos.
Esto no significa una sujeción u obediencia incompatibles,
sino de la misma naturaleza, es decir: eso es necesario que así sea, por ser
una sola carne o una misma cosa. El no ser así, sería contra naturaleza. Como
si es la sujeción y obediencia sociales de tipo esclavista o machista. Si una
pareja de esposos, se da cuenta mientras estudia esto, que sus relaciones no
han sido como dice aquí, no queda otra, que convenirlo y ponerse al día; si es
el esposo quien ha sido el primero en haberlo dejado de hacer, no debe pensar
que la esposa entonces, se ensañaría de él, porque ella debe responder desde su
posición igualmente. La relación entre los esposos no son dependientes, ni
independientes, sino interdependientes. Es natural entonces, que la Iglesia y
la Esposa, sean sujetas y obedientes. Porque ¿Cómo responde la iglesia a
Cristo? Obedeciéndole en todo, alabándole, y adorándole, aunque esto es como
Dios, que es Cristo. En el caso del esposo no, pero tiene un principio, por lo
cual Sara llamada a Abraham, Señor. Esto
es la analogía que lo exige que así sea, para el hogar bíblico. En este criterio
es que el apóstol Pablo dice que grande
es este misterio y enseña que la mujer debe guardar silencio ante el marido y
no debe enseñar en la iglesia. Porque relaciona el principio de creación,
diciendo que el hombre fue creado por Dios primero que la mujer y alega que fue
la mujer la que cayó en pecado antes que el hombre, no culpándola, sino
pensando que de ahí en adelante, el hombre o esposo gobernaría a su mujer,
según lo dicho por Dios, en que el deseo de la mujer era para su marido y que
él se enseñorearía de ella, Gn.3:16. 1Ti.2:12-14. Por otro lado, esa sujeción y
obediencia de la Iglesia y la esposa, no son caprichosas, porque están en base
a la analogía en que Cristo y el Esposo deben amar a su iglesia y esposa como
así mismos. Es decir dándoles cuidado y sustento que se daría uno mismo, en lo
mejor de su deseo. Pues, dice que el que ama a su esposa, así mismo se ama. Por
esa razón el esposo no hablaría en contra de su esposa, a pesar de que haya
razones justificables, porque hablaría mal de sí mismo. Cristo dio su vida por
la Iglesia, murió por ella. Del mismo modo, la analogía exige que lo sea el
esposo para con su esposa. Cristo es responsable de su iglesia en todo, hasta
llevarla a su misma presencia, desde el punto de vista de la salvación. Nadie
tiene que hacer nada contra la Iglesia, pues ni las puertas del infierno,
prevalecerán contra ella, dice el Señor, Mat.16:18. Así de la misma manera, el
esposo es responsable de su esposa, atendiéndola, y sustentándola en todo, hasta la muerte: como se dice en el
compromiso matrimonial: “hasta que la muerte los separe”. Por eso es
comprensible, que no existe divorcio ante los ojos de Dios, a pesar de las
causales de Jesús, que tienen su explicación de lo que significa. El pasaje
dice que Cristo, purifica a su iglesia de modo que no tenga arrugas, ni mancha,
para presentársela a si mismo. Lo que por su parte, el esposo haría con su
esposa, no permitiendo que sufra enfermedades, o hambre o ninguna necesidad y
con su fidelidad de ser solo para ella, la mantendrá limpia, pura, como prueba
de su santidad personal, que no sería, sino fuera así, en este comportamiento
para con su esposa. A esto se refiere entonces, la figura de ser cabeza de la
Iglesia o de la esposa. Cristo dirige a su iglesia a través de su palabra, el
esposo igualmente lo hace con su esposa, mediante el diálogo permanente de la
expresión de amor hacia a ella. Comprendiéndola, antes que ella lo comprenda a
él. El trato del esposo para con su esposa es una cosa muy delicada, dice 1Pe.
3:7. Con razón una autoridad pedagógica en el llamado al sagrado ministerio
dice que a pesar de las maldades que una mujer cometa contra su esposo, aun
cristiana, el responsable es el hombre, en especial en el caso de pastores.
Algún vacío dejó de cubrir o responder, para que ella actuara así, aunque al
parecer, fue su propio gusto lo que hizo. Fue un efecto de causa. A todo esto
nos lleva la analogía entre Cristo y la Iglesia, con el esposo y la esposa. La
enseñanza, es: que la verdadera vida cristiana se da es en el hogar bíblico,
cristiano y feliz, para de ahí conformar la iglesia del Señor, compuesta por
los hogares, con miembros de la iglesia, Ro.16:5. Para dar a conocer a Dios a los que no les conozcan, sería
como diciendo: si quieres conocer como es Cristo con su iglesia, míranos a
nosotros como esposos. Se debe aclarar que lo dicho sobre la esposa y el esposo
aquí, nada tiene que ver con los hombres y mujeres solteros. No es el género
masculino, ni femenino, en forma genérica, que tienen que responder a estos
requerimientos en sí. Esto es solamente para los casados que forman el
matrimonio.
D. Los hijos. El mandamiento de Dios para los
hijos, es el de honrar a sus padres. Esta honra, implica toda obediencia y respeto,
cosas que al hacerlo, tienen de parte de Dios, la promesa de vivir hasta la
vejez. Respecto a los padres, ellos son
la cabeza de sus hijos. No uno de los dos, sino ambos. La crianza de los hijos
será bajo la sombra de su ejemplo. Ellos son los verdaderos responsables de
esos hijos que traen a este mundo, a pesar de que es Dios quien nos los da; de
eso trata la paternidad responsable. Los padres tendrán bien claro, que el amor
a sus hijos, no restará el amor entre ellos. Si uno de los dos cae en el error
de amar mas a sus hijos, restándole el amor a su cónyuge, el hijo o hijos, serán
mal criados, como resultado de ese desequilibrio entre sus papás, al no ver el
ejemplo de relación entre ellos, para cuando formen sus propios hogares. Es por
eso, que algunos esposos, se separan después de criar a sus hijos, porque fue
tan grande el daño, que se hicieron ellos mismos, por amar mas a sus hijos descuidándose
ellos. Los hijos son por un rato, los padres siguen juntos, al quedar solos. Este
comentario está en base a Ex.20:12.
Dt.6: 4-9. Ef.6:1-4. 1Ti.5:8. En la crianza de los hijos, los padres son
productores, administradores y lideres. Son los que hacen que las
cosas funcionen, distribuyen el tiempo, saben comunicarse escuchando y
aceptando a cada cual tal son, solucionan problemas mediante el dialogo en
amor, asumiendo actitudes interactivas de ganar-ganar.
E. Diferentes clases de familias en la
sociedad histórica.
¿Cuáles son las diferentes clases de familia que
se han dado a través de la historia?
Comunidad primitiva: ésta nace con la aparición del
hombre en la tierra y su desarrollo conforme a diferentes formas de
organización social.
La horda: es la forma más simple de
la sociedad, son nómadas, no se distingue la paternidad, son un grupo muy
reducido.
El clan: conformado por un grupo o
comunidad de personas con una audiencia común, en la que tienen gran
importancia los lazos familiares y la obediencia de un jefe.
Esta estructura cambió definitivamente las vidas de los habitantes de aquella
época, pues se tuvieron que regir a ciertas condiciones de un líder.
¿Tiene que ver la cooperación, solidaridad y consanguinidad para que a un grupo
social se le pueda llamar familia?
Pronto aparecieron nuevas formas de organización documentadas cronológicamente:
La familia Consanguínea: Se considera como la primera etapa de la familia,
en ella los grupos conyugales se clasifican por generaciones: todos los abuelos
y abuelas en los límites de la familia son maridos entre sí; lo mismo sucede
con los hijos. En esta forma de familia, los ascendientes y los descendientes,
los padres y los hijos son los únicos que después de lejanos y, finalmente de
las personas más lejanas están excluidos de los deberes del matrimonio.
Familia Punalúa: Es el primer progreso en la organización de la familia,
consistía en excluir a los padres y a los hijos del comercio sexual recíproco,
el segundo fue en la exclusión de los hermanos. Por razones económicas y
prácticas la familia tuvo que dividirse, su extensión disminuyó y renunció a la
unión sexual entre hijos de la misma madre.
Familia Sindiásmica: Este tipo de
familia aparece entre el límite del salvajismo y la barbarie. Cuando las
prohibiciones del matrimonio se hicieron más drásticas y complicadas, las
uniones por grupo fueron sustituidas por la familia sindiásmica. En esta forma
familiar, un hombre vive con una mujer, pero le esta permitida la poligamia, y
la infidelidad aunque por razones económicas la poligamia se observa raramente,
al mismo tiempo se exige la mas estricta fidelidad a las mujeres y su adulterio
se castiga cruelmente.- actualmente en algunos países de África se castiga a la
mujer lapidándole (apedreándola) por adulterio-
Familia monogámica: nace de la
familia sindiasmica, en el periodo de transición entre el estado medio y
superior de la barbarie. Es uno de los síntomas del nacimiento de la
civilización, se funda en el predominio del hombre, su fin es procrear hijos
cuya paternidad sea indiscutida, eso era indispensable porque los hijos serían
los herederos de las propiedades del padre. Este tipo de familias es más sólida
que la familia sindiásmica, en los lazos conyugales, los cuales solo pueden ser
rotos por el hombre. La monogamia facilita el cuidado de los hijos, puesto que
ambos cónyuges comparten los mismos afectos y atenciones hacia ellos, sin las
rivalidades existentes entre los hijos de uniones distintas.
La familia monógama simplifica también las relaciones de consanguinidad y
constituye una unidad social más firme y coherente que ninguna otra; y en ella
la mujer goza de mayor protección y tiene una posición de jerarquía y dignidad.
Cierta ventaja de la familia monogámica es la sanción de un sistema religioso
autoritario, no resulta difícil comprender por que tal tipo de unión
matrimonial predominó en los pueblos de la antigua cultura occidental.
Se ha discutido mucho si la poligamia precedió a la monogamia en la evolución
histórica de la familia. Spencer y otros sociólogos del siglo XIX, en sus
interpretaciones nos dicen que:
“Toda forma de evolución va de lo orgánico o desorganizado hacia lo
lo orgánico u organizado, primero fue la promiscuidad sexual, después las
uniones poligámicas y por ultimo la monogamia”
Pero otros estudios que realizo Malinovsky, entre los pueblos de cultura primitiva,
vino ganando terreno en la opinión contraria que la monogamia fue anterior a la
poligamia, en ellos confirman que los procesos evolutivos relativamente
duraderos tienden a confirmar la tesis de prioridad de la monogamia.
Familia poligámica: es cuando existe
una pluralidad de cónyuges. Existen tres formas teóricas de la poligamia: 1)
matrimonio en grupo.-es en el que varios hombres y varias mujeres se hayan en
relaciones matrimoniales reciprocas. 2) poliandria.- es en la que varios
esposos comparten una sola esposa. 3) poliginia.- consiste en una pluralidad de
esposas que no tienen que ser necesariamente hermanas, y adquiridas, por lo
general en diversas épocas a lo largo de la vida.
De estas tres formas teóricas las dos más importantes y de las cuales se ha
discutido bastante son la poliandria y poliginia.
En la poliandria se llegó a la conclusión que las personas vivían en las peores
condiciones de vida, llegando a extremos tales de miseria que un solo hombre no
podía mantener a una familia. Otra causa es que en los pueblos primitivos había
escasez de mujeres, esto debido a la práctica del infanticidio
Fuente(s):
F. Pecados sexuales.
a. Fornicación. El pecado sexual de fornicación, se comete en
la relación sexual fuera del matrimonio, sea como soltero o en unión libre.
Heb.13:4.
b. Adulterio. El pecado de adulterio por otro lado, se comete
en la relación sexual de los casados, fuera del matrimonio. Heb.13:4. Los
pecados sexuales de fornicación y adulterio, son pecados del cuerpo, que como
tal, están dentro de la moral y la ética social. Como lo requerido por la ley
de Dios, para practicar las relaciones sexuales es en el matrimonio: estos
pecados se cometen es al transgredir la ley divina, por hacerlo fuera del
matrimonio. De eso, es que se tienen que arrepentir, quienes los hayan cometido.
Si no es así, el pecador de estos pecados, no siente necesidad de
arrepentimiento, porque las relaciones sexuales en sí mismas, son gustos
naturales del cuerpo, hecho por Dios, de modo que nadie se siente mal el
hacerlas; es todo lo contrario, mientras más lo hace, más quiere. Tanto casados
o no, porque no es el tener sexo el pecado; si fuera así, sería pecado el
hacerlo aun dentro del matrimonio. Por
eso un creyente se puede quedar viviendo en este pecado, porque se siente bien
haciéndolo. Es cuando sabe y reconoce
que ha quebrantado la ley de Dios haciéndolo fuera del matrimonio, que se debe
arrepentir. Son tan graves estos pecados, que la Biblia advierte que no se
relacione con un creyente que viva en pecado de fornicación, 1Co.5:9-11. Y no
entrarán al reino de Dios, 1Co.6:9. Apc.22:15. Igualmente el adulterio, Jesús dijo que tan
solo con mirar a una mujer para codiciarla, ya se cometía adulterio en el
corazón, Mat.5:28. Y Era uno de los pecados de muerte, Lev.20:10. Jn.8:4-5. Ahora
bien, si es pecado el sexo fuera del matrimonio, mucho más es la relación
entre los homosexuales. Por otra parte, es
de hacerse notar, que parece mentira, que estos pecados, son comunes entre los
creyentes, desgraciadamente. Son tantos los matrimonios entre nuestros jóvenes,
que ya han cometido fornicación al casarse y muchas novias van en embarazo al
matrimonio. Yo he celebrado muchos matrimonios así, lo sé porque a los 7 meses
dan a luz. A la vez, muchos creyentes
dan malos testimonios de adulterios. Nos preguntamos: ¿cuál será la causa? Ya
que todos conocemos la Biblia, al respecto.
c. Homosexualismo. El pecado del homosexualismo, es conocido
como las relaciones sexuales entre el mismo sexo y es tan horrible hoy, que
estamos frente a una de las señales del fin del mundo, dicho por Jesús, Lc.17:27,
y Judas 7. Esto no es un problema biológico, ni de salud, como lo creen quienes
están de acuerdo que en la iglesia se acepte esta conducta, sino que es un
pecado sexual, Ro.1:27. La pregunta es: ¿Por qué son aceptables estas relaciones
entre los creyentes, si ellos conocen la biblia, que dice que eso es pecado? Además,
está fuera de lo razonable, en cuanto a la formación de una familia, contra la
naturaleza de la procreación y de la sexología de solo dos sexos, el masculino
y el femenino. Para el mundo no es problema, pero que en la iglesia sea lo
mismo, es lamentable.
G. Divorcio y nuevas
nupcias. Originalmente
en la mente de Dios, no estuvo la idea de divorcio. Así lo dijo Jesús en Mat.19:4-6. Y Pablo en 1Co.7:10. Fue con
Moisés que Dios le permitió el divorcio, pero por razones de no poder perdonar,
vs,8. Si se dada divorcio, la divorciada o divorciado, cometía adulterio al
volverse casar Mt.5:31-32. Mt-19:9, habla
de la clausula de Jesús: ”salvo por causa de fornicación”. Pero la verdad de
esto, de la clausula de Jesús, es dada para los que se casan y al efectuar las
relaciones sexuales, descubre que la novia no era virgen, o sea había cometido
fornicación antes de casarse. Esta es la única vez, dice Jesús, que se pueden
divorciar. Esto es comprobado en la actitud de José, al querer dejar a María,
al descubrir que ella estaba embarazada, sabiendo él, que no la había conocido
en las relaciones sexuales todavía, Mt.1:19-20. Al mismo caso se refieren los
judíos contra Jesús, al decirle, que ellos no eran nacidos de fornicación, Jn. 8:41.
Queriéndole decir, que él era hijo de un embarazo antes de casarse María con
José. O sea que Jesús no era hijo de José. Y por supuesto, menos de Dios, que
era lo que los judíos no creían. Esto
era bien conocido para los judíos, Dt.24:1-4. Además de las costumbres sobre el
matrimonio judío. Pablo, dio otra
clausula que no dio Jesús, pero tampoco permite el divorcio. Es la separación
del cónyuge incrédulo, 1Co.7:15. Ahora bien, como presbiterianos, nuestra
iglesia Presbiteriana del Sínodo Reformado en Colombia, legisló
eclesiásticamente sobre este particular, Capítulos 1,2, y 3, de su
Constitución. En esta legislación sobre el divorcio y las nuevas nupcias, según
el criterio tradicional de la interpretación desde la reforma por el humanista Erasmo
de Rotterdam y no según lo dicho arriba de su verdadera interpretación. Sin
embargo, El divorcio y las nuevas
nupcias, legisladas por el Sínodo, no se deben dejar al criterio de los
implicados, sino que se deben dar ciertos pasos, según nuestro sistema de
gobierno, mediante los diferentes tribunales de justicia eclesiástica: tal como
el Honorable Consistorio, el honorable Presbiterio y el Venerable Sínodo. Ahí
está bien indicado lo que se debe hacer, hasta llegar a su culminación. El
estudio hecho bajo sus procesos, fijará el
veredicto final. Porque, dentro de lo tratado, está el cuidado de cómo
se protegerán los hijos, si los hubo en el matrimonio, porque el daño mayor
como resultado de un divorcio, es el que se le hace a los hijos. Los
divorciados, aunque buscan su propia felicidad, la de sus hijos debe estar
primero, por eso un divorcio y nuevas nupcias, no se deben aceptar a la ligera
como cosa de la búsqueda de la felicidad de los participantes en el divorcio,
porque resultaría en el peor pecado de egoísmo, de modo que por satisfacerlo,
no tienen en cuenta a sus propios hijos.
Conclusión: Ahora nos damos cuenta, lo que
implica un hogar bíblico, cristiano y feliz. Esto nos lleva a examinar nuestros
hogares, en nuestras iglesias. Si encontramos después de verlo, como un análisis, que estamos fallando, es
motivo de ponernos temerosos delante de Dios,
e inmediatamente empezar a hacer la corrección necesaria, que esto
exija. ¡Que Dios nos ayude a tener nuestros hogares como El lo quiso que fueran!
Como los hogares bíblicos que fueron tenidos como LA IGLESIA QUE ESTA EN SU
CASA, Ro.16:5,10-11. El taller a continuación nos puede ayudar en esta tarea.
TALLER:
1. ¿Cuántos hogares hay en su iglesia?
2. ¿Es su hogar verdaderamente: bíblico, cristiano y feliz?
Si ( ) no ( ) si no, ¿qué tendría que hacer?
2. ¿Qué piensa Ud. sobre el divorcio y las nuevas nupcias?
3. ¿Qué habría que hacer para que todos los hogares de su
iglesia, sea bíblico, cristiano y feliz?
Apunte:
________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________